Fabio Capello ha revelado que la estrella brasileña Ronaldo Nazario le causó interminables problemas con sus fiestas y que el vestuario del Real Madrid a veces apestaba a alcohol. “O Fenómeno” se acercaba al ocaso de su carrera cuando jugó para Capello durante seis meses en la temporada 2006-07.
Y aunque el disciplinario italiano describió a Ronaldo, que entonces tenía 30 años, como el “mayor talento” que jamás haya entrenado, su choque de personalidades fue interminable. “El mayor talento que entrené fue Ronaldo”, dijo Capello a Sky Sport Italia. “Pero al mismo tiempo fue el jugador que más problemas me creó en el vestuario. Solía organizar fiestas y hacer de todo”.
“Una vez [Ruud] Van Nistelrooy me dijo: “entrenador, el vestidor huele a alcohol“. “Luego, Ronaldo fue a Milán y comenzamos a ganar, pero si hablamos de talento, fue el mejor, sin duda”. A pesar de sus enfrentamientos en ese momento, Capello dijo que la pareja habla “cálida y agradablemente” cada vez que sus caminos se cruzan ahora.
No es la primera vez que el entrenador italiano describe a Ronaldo como el mayor desafío de gestión en su larga carrera en los banquillos. Capello ha recordado previamente cómo Ronaldo regresó de una lesión con gran sobrepeso. Dijo en 2018. “Estaba a cargo del equipo, regresó de una lesión y vino a nosotros en noviembre para reiniciar el trabajo”.
“Pesaba 96 kilos, un peso de boxeo. Le pregunté cuánto pesaba cuando ganó la Copa del Mundo [en 2002] y dijo 84 kg, así que le pedí que al menos llegara a 88 kg. Fue una pena, no quería hacer el menor sacrificio y lo mejor que logró fue 94 kg. Jugó tres juegos en asociación con Ruud van Nistelrooy y perdimos los tres”.
Aunque el brasileño anotó 104 goles en 177 apariciones para el Real Madrid, ayudando al equipo de los ‘Galácticos’ a ganar LaLIga en 2003, logró solo cuatro goles en 13 salidas bajo Capello. Cuando Ronaldo se fue a Milán, expresó su agradecimiento a todos en el Real, excepto a Capello.
Ronaldo dijo: “Me gustaría agradecer a los aficionados que me han apoyado todo este tiempo y a todos los compañeros de equipo que he tenido aquí y a todos los entrenadores que he tenido, excepto uno”. En respuesta, Capello dijo: “Le deseo la mejor de las suertes haciendo lo que solía hacer, que es ser un gran jugador”.
Irónicamente, a pesar de ganar el título de la liga esa temporada, Capello fue despedido en junio de 2007 porque su estilo de fútbol estaba en desacuerdo con el enfoque tradicional del Real Madrid.