El Barcelona elige a Quique Setién como sustituto de Ernesto Valverde en el banquillo

El técnico cántabr llevaba medio año sin equipo

Quique Setién es el nuevo entrenador del Barcelona tras la destitución de Ernesto Valverde. La noticia llegó la noche del lunes, cuando el club catalán despidió al ‘Txingurri’ y anunció la incorporación del técnico cántabro, que se sentará en el banquillo blaugrana lo que resta de temporada y dos más.

El nuevo entrenador será presentado el mediodía del martes a las 14:30 horas. Antes, Setién tendrá la oportunidad de dirigir su primer entrenamiento con el equipo a las 11 de la mañana.

El nombre de Setién ya estuvo ligado al Barcelona en el pasado. Su apuesta futbolística, muy en la línea del ADN Barça, se pudo apreciar en equipos como Las Palmas o, más recientemente, en el Betis.

La oportunidad del cántabro llega este invierno, cuando la confianza de la Directiva en Ernesto Valverde se ha visto agotada por la debacle ante el Atleti en la Supercopa. Tan solo la gota que colma el vaso después de otras catástrofes como las europeas en Roma y Anfield.

Quique Setién nunca ocultó su admiración por el estilo de fútbol que se practica en Barcelona. Cruyffista reconocido, el extécnico verdiblanco es uno de los pocos que se mantienen fieles a un estilo que cada vez se practica menos en el fútbol europeo.

Primera experiencia en un club grande

Después de un largo periplo que comenzó en el Racing de Santander, a quien ascendió a Primera División, un breve paso por el Poli Egido, la selección de Guinea Ecuatorial y el Logroñés, el cántabro subió al Lugo y lo mantuvo durante seis años en la Categoría de Plata. Ahora, Setién se enfrenta a su primera experiencia en un equipo tan grande como el Barça.

Antes, el técnico santanderino demostraría momentos de gran fútbol en su temporada y media en Las Palmas. Tras dejar el equipo amarillo en una salida un tanto convulsa, recaló en el Betis, donde pudo desplegar su estilo de juego, con el que clasificó a su equipo a la Europa League y a las semifinales de Copa, hasta que la ruptura con la afición y la directiva lo obligó a dejar el Benito Villamarín.

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