La crisis del coronavirus está obligando al Real Madrid a planificar la próxima temporada, tomando decisiones antes de lo previsto. Una de ellas es la continuidad de Zidane en el banquillo, tal y como informa el diario AS, que asegura que el francés, pase lo que pase en Liga y Champions, seguirá al frente del equipo en la 20/21.
A día de hoy es difícil saber lo que ocurrirá: si se podrán disputar finalmente las competiciones nacionales, así como la Champions y la Europa League y, en caso de que se reanuden, no se sabe del todo cuándo será. Por ello, el Madrid piensa ya en la próxima temporada y, para dirigirla, ha decidido quedarse con el francés.
El plan inicial era esperar a que finalizase la temporada y tomar una decisión en función de los objetivos alcanzados. Levantando LaLiga, muy a mano teniendo al Barça a dos puntos, serviría a Zidane para mantener el puesto. Aunque un fracaso en Liga y Champions hubiese abierto la puerta a renovar el banquillo blanco, esperando candidatos de la talla de Mauricio Pochettino.
Pero las consecuencias del coronavirus, que tiene a la primera plantilla en cuarentena por el positivo de Thompkins, jugador del equipo de baloncesto que estuvo en contacto con las zonas comunes de Valdebebas. Por tanto, en la plana mayor del club opinan que lo más prudente será mantener a Zidane en el banquillo, pase lo que pase con las competiciones suspendidas.
Altas y bajas
De este modo, Zidane y el resto del cuerpo técnico trabajan en la planificación de la temporada que viene, aunque con la incertidumbre de la situación, pues todo apunta a que la próxima Liga no podrá iniciarse en el calendario previsto, dados los aplazamientos de las actuales competiciones.
Así las cosas, el técnico francés deberá elegir qué jugadores deben salir (Brahim, Jovic, Mariano, Bale, Brahim o James) y cuáles deben llegar (Achraff, Odegaard, Borja Mayoral, Reguilón, Lunin, Ceballos, Óscar Rodríguez o Kubo). En cualquier caso, Zidane tendrá tiempo para tomar decisiones sin precipitarse.